2-1: Victoria de mérito
El Espanyol vence a un buen Sevilla gracias a los goles de Pere Milla y Roberto
El RCD Espanyol sumó tres puntos importantes este lunes ante el Sevilla. El conjunto blanquiazul, tras un espectacular arranque, supo mantenerse en el partido en los momentos complicados para después sentenciar en un buen segundo tiempo. El gol visitante puso un poco de emoción y tensión a los minutos finales.
Salió el Espanyol con su ímpetu habitual en los partidos que disputa como local. Los primeros diez minutos fueron una avalancha de fútbol ofensivo con un Espanyol absolutamente desatado mostrando todos sus recursos de ataque. Romero lo intentó con la derecha en la primera llegada del partido y Kike García, titular en la delantera, estuvo muy cerca de rematar con un chut que salió lamiendo el palo de la portería defendida por Odysseas. Sin embargo, la más clara fue una contra de Pere Milla, que el delantero ilerdense no pudo transformar si bien es cierto que la jugada había quedado anulada por fuera de juego.
Pese a un inicio brillante, el Espanyol no consiguió adelantarse en el marcador y el partido entró en una fase más turbia. El Sevilla comenzó a tener más la pelota y empezó a tener mucho más protagonismo ofensivo. Dmitrović, que estrenaba paternidad, se erigió en el héroe perico con intervenciones de mucho mérito para dejar su portería a cero. Hasta la suerte se alió con el portero serbio, que tuvo la ayuda del palo en un chut lejano de Akor. Los visitantes, además, pusieron a prueba la solidez defensiva local en varias jugadas de estrategia prácticamente consecutivas.
El Espanyol necesitaba hacer un reset y recuperar sensaciones. Y lo hizo rápidamente. De nuevo, el equipo volvió a dar un paso al frente y un buen centro de Dolan, con la izquierda, lo aprovechó Pere Milla para rematar por toda la escuadra. Lejos de echar el equipo atrás, Manolo González puso a Roberto con Kike García en la punta de ataque para intentar cazar alguna contra. El Espanyol buscaba la fórmula de sentenciar, aunque es cierto que Dmitrović tuvo que volver a intervenir para despejar un chut lejano de los sevillistas.
El partido pareció quedar sentenciado después de un sensacional gol de Roberto Fernández con un tiro espectacular desde fuera del área. Sin embargo, los minutos finales se complicaron tras el autogol de Cabrera. Con sufrimiento, pero con mucho convencimiento el Espanyol se acabó llevando los tres puntos.
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