Atrás
1-2: Repóker … Y Felices Fiestas
El Espanyol remonta el tanto inicial del Athletic y termina de forma sobresaliente un 2025 histórico
Pues sí: tocaba sudar y correr y esforzarse y no guardar ni un esfuerzo. Tocaba seguir concentrado y volver a mostrar la excelente imagen de lo que llevamos de temporada. Y eso hizo el Espanyol ante un Athletic intenso para llevarse los tres puntos, sumar un repóker consecutivo de victorias y cerrar de forma espléndida un 2025 histórico. Pues sí: se intuía partido de los gordos en San Mamés, de los que hacen afición como decían los narradores de los carruseles de los 80, de los que te tienen con las pulsaciones disparadas por la vorágine que llega a las dos áreas. Pues sí: duelo de banquillos entre Valverde y Manolo González que se admiran mutuamente y se prodigan en elogios sobre la calidad del rival. Todo apuntaba a partido grande entre dos equipos que querían acabar el año con una victoria reparadora (para los locales) y de carácter (para los blanquiazules). Y así fueron los primeros 45 minutos: un toma y daca continuo. Un ir y venir por todo el campo exigiendo a las defensas y a los porteros. Unai Simón se llevó un par de sobresaltos antes de la media hora, sobre todo con un chut lejano de Roberto, que lo vio adelantado, y desde lejos colocó su chut ligeramente por encima del larguero. Lo mismo tuvo que hacer Dmitrovic. Primero, con el pie, ante Gorosabel y después con una mano increíble ante Berenguer.
Pero en esta primera parte aún hubo más. Hubo un gol local en el que Berenguer, pillo e intuitivo, se coló entre Omar y el meta perico para marcar de forma sutil el 1-0. Fue justo en la jugada siguiente a la de Roberto, que se escapó en un mano ante Unai Simón y acabó trastabillado dentro del área ante el meta. La repetición no fue muy clara, pareció que hubo contacto, más que nada porque su caída no parecía natural, pero… Pero, justo antes del descanso, Romero enganchó un zurdazo desde fuera del área, después de un rechace de Sancet, para colarse al lado de la escuadra de la meta local. Un golazo increíble para poner el empate.
La segunda mitad comenzó con el mismo ímpetu en las dos áreas, pero se decidió con una jugada en la que Dolan recuperó la pelota después de haberla perdido, centró al área, Roberto no llegó por centímetros y Pere Milla alcanzó el remate para colocarla dentro de las redes, se llevó un golpe tremendo de Unai Simon y acabó sustituido unos minutos después. Ese 1-2 certificaba el buen momento blanquiazul, su fe en la victoria, su lucha por darle la vuelta al marcador.
Aún quedaba una eternidad y tampoco iban a faltar las ocasiones. Primero una de Roberto, luego otra de Jofre al que se le escapó el gol por centímetros después de una buena contra. Y más trabajo extra para Unai Simón a poco de llegar al final y para Dmitrovic en el añadido. Al final, tres puntos más para el casillero blanquiazul que certifican el excelente trabajo de este 2025. 33 puntos, a dos jornadas para el final de la primera vuelta. Tanto el técnico, como los jugadores no quieren oír hablar de retos, de metas ni de expectativas. La receta del partido a partido está dando un resultado sobresaliente.
Ahora sí: Felices Fiestas.