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0-1: Victoria y gran imagen
Un gol de penalti de Roberto hace justicia al juego del equipo en el primer test de la semana en Alemania
El RCD Espanyol iniciaba su estancia en Alemania con un interesante partido ante el VfL Wolfsburg. El conjunto blanquiazul, que ante el Southampton dio un paso adelante, disponía de una nueva oportunidad para seguir con su preparación y mejora.
El primer tiempo del RCD Espanyol fue bastante completo. El equipo, muy incisivo en la presión, agobió al Wolfsburgo y le generó muchos problemas en la salida de balón. No estaba nada cómodo el conjunto germano, mientras el conjunto blanquiazul ganaba en seguridad viendo que el plan de partido era el correcto. La intensa presión perica derivó en un buen par de llegadas por parte del equipo dirigido por Manolo González, capaz de provocar siete córners a favor en los primeros 45 minutos.
La estrategia fue la principal aliada de los espanyolistas que tuvieron sus opciones. Miguel Rubio irrumpía como un coloso en el área de los locales y tuvo el gol en un remate de cabeza que despejó Kamil, aunque el árbitro había señalado fuera de juego. El central blanquiazul fue un auténtico tormento para los alemanes en los saques de esquina. El portero local fue el jugador más destacado de los locales evitando el gol de Pere Milla tras un remate lejano. Roberto, muy luchador como siempre, pudo marcar tras un chut de Ramon Terrats con la derecha.
La defensa sostuvo bien a los locales. El principal argumento ofensivo del Wolfsburgo fue el animoso Amoura, que trató de sorprender en un par de ocasiones a Dmitrović, aunque el portero serbio no tuvo problema alguno.
Manolo González dio continuidad al once del primer tiempo, mientras el Wolfsburgo cambiaba por completo. El Espanyol arrancó algo más tímido tras el descanso, aunque continuó dificultando la salida de balón de los locales. Rubén Sánchez apareció algo más en ataque y generó un par de acciones de peligro. Rubio seguía a lo suyo en los córners, aunque al central sólo le faltó conectar algún cabezazo a puerta. El equipo blanquiazul siguió apretando y, por fin, llegó el premio. Pol Lozano recuperó en la línea de tres cuartos y aunque su remate no acabó en gol, el rechace de Roberto dio en el brazo de un defensa. El delantero asumió la responsabilidad y batió a Pervan con mucha seguridad.
Después del gol comenzó el carrusel de cambios por parte del Espanyol, que siguió muy firme en defensa y con las ideas claras en ataque. Las sensaciones que transmitía el equipo continuaban siendo muy positivas ante un rival que sólo se acercó en una jugada finalizada rematadamente mal por Wimmer. Al final, victoria con una gran imagen en el primer test de la semana en Alemania.